jueves, 28 de noviembre de 2013

EL CÁNCER DE PRÓSTATA

La prevención de las enfermedades es algo de suma importancia para que podamos fomentar un estilo de vida sano a lo largo de toda nuestra vida. Las campañas de prevención hacen despertar el interés de las personas por visitar con frecuencia a su médico.  Es muy importante que tengamos en cuenta que prevenir las enfermedades es algo fundamental  que puede contribuir al tratamiento y a la cura de muchas  dolencias de forma temprana, evitando largos sufrimientos.  Mantener buenos hábitos de vida y vivir de manera equilibrada es primordial para que consigamos disfrutar de la vida de manera sana, pero no siempre eso es posible. Por este motivo,  es fundamental que seamos conscientes de que, aunque nos sintamos bien, debemos visitar al especialista para la realización de exámenes que tienen por objetivo informarnos de la real situación en que se encuentra nuestro organismo, reduciendo así las posibilidades de tener anomalías.  
En los primeros años de vida las madres siempre están atentas a las visitas de sus hijos al pediatra, cosa que se alarga hasta la adolescencia,  o por lo menos debería ser así.  Ya en la adolescencia, desafortunadamente  los hombres perdemos la costumbre de acudir al médico, salvo que uno se encuentre en situación de verdadero peligro de salud o dificultad ocasionada por alguna enfermedad, accidente, etc.; y así vamos hasta que llegamos a las edades más avanzadas.

¡Tremendo error!

Hay muchas enfermedades que se pueden desarrollar a lo largo de toda una vida y sólo ser detectadas estando el paciente en niveles muy avanzados de la misma, como por ejemplo, el cáncer. Si las personas tuviesen la costumbre de hacer las pertinentes visitas a su médico, estoy seguro de que nos ahorraríamos un gran número de problemas y de posibles pérdidas. Es inútil hablar de medicina preventiva basada en actividad física, alimentación equilibrada o en cualquier otra acción por el estilo, si uno no se preocupar de  saber en qué condiciones de salud se encuentra mismo después de haber empezado un programa de entrenamiento. Tengo una gran preocupación con respecto a la población masculina, puesto que al mismo tiempo que se hace tanto énfasis a las campañas de prevención del cáncer de mama, cosa que me parece fundamental, y por fortuna hablamos de esta clase de cáncer sin tabús, es imprescindible que también hablemos del cáncer de próstata sin rodeos. Es esencial que los hombres nos dejemos tonterías y que empecemos a hablar abiertamente sobre el tema, además de acudir con frecuencia al especialista para los debidos controles.
Desde luego existen varios factores que pueden propiciar el desarrollo de esta enfermedad. Al mismo tiempo que las mujeres son proclives al desarrollo del cáncer de mama, los hombres tenemos propensión  a padecer cáncer de próstata. Hemos de dar atención a una serie de factores que pueden ser claves para el fomento de esta enfermedad,  tales como un mal estilo de vida, los excesos en los vicios (tabaco, alcohol, drogas),  etc. Los jóvenes tienen menos predisposición  a tener enfermedades, pero no están excluidos. Éstos son algunos de los síntomas del cáncer de próstata:

  • Hematuria (sangre en la orina o en el semen).
  • Impotencia (dificultad para lograr una erección).
  • Problemas para orinar, un flujo urinario lento, o necesidad de orinar varias veces, sobre todo por la noche.
  • Al orinar no ser capaz de vaciar toda la vejiga.
  • Dolor en las caderas, en la espalda, en el tórax, u otras áreas debido a la propagación del cáncer en el cuerpo.
  • Falta de fuerza o adormecimiento en los pies y piernas, pérdidas de control de la vejiga o de los intestinos debido a la presión que el cáncer ocasiona en la médula espinal. Estos síntomas también pueden ser ocasionados por otras enfermedades, motivo por el cual es muy importante acudir al médico con regularidad para que éste pueda hacer las debidas exploraciones y, si es necesario, empezar un tratamiento con el fin de solventar la situación. Es de interés saber que una de las enfermedades que presentan síntomas muy similares es la HIPERPLASIA PROSTÁTICA BENIGNA (BPH) que es el agrandamiento de la próstata. Ésta ocasiona dificultad para orinar con mucha más frecuencia que el cáncer. 

Grupos de riesgo:

  • Hombres mayores de 60 años.
  • Hombres de raza negra.
  • Factores genéticos.
  • Hombres que consuman una dieta rica en grasa, sobre todo animal.
  • Hombres que trabajan en industrias químicas: pintores, hombres expuestos al cadmio, trabajadores de las plantas de neumáticos.
  • Granjeros, agricultores (por exposición a agrotóxicos).
  • Hombres expuestos al agente naranja.

Los vegetarianos tienen una menor predisposición a padecer cáncer de próstata. En los hombres mayores de 75 años, es la causa más común de muerte.
Ante la existencia de cáncer en la próstata, el tratamiento dependerá del grado de anormalidad de las células cancerosas, de la existencia o no de metástasis habiendo una propagación del cáncer por fuera de la glándula prostática (puntaje de Gleason)  (1). En el caso de no haber diseminación del cáncer, no existiendo una propagación importante por fuera de la glándula prostática, es posible curarse. Normalmente, el cáncer de próstata empieza a manifestarse en los hombres a partir de los 40 años de edad, y de acuerdo con el historial genético y los hábitos de la persona en cuestión, el médico direccionará el enfoque para el tratamiento de una manera o de otra.  
Es factible disminuir el riesgo de padecer este tipo de cáncer manteniendo una dieta equilibrada, libre de alcohol, de tabaco, de drogas, con una  ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos omega – 3, bajos en grasas. La dieta vegetariana puede ser una buena opción, o la comida japonesa tradicional.
La actividad física siempre es beneficiosa, pues la práctica del deporte o del  ejercicio físico es fundamental ya que son capaces de reactivar el cuerpo, ayudando a combatir las células malignas debido a que, cuando entrenamos, llenamos nuestro cuerpo de oxígeno, y las células cancerígenas  tienen poca resistencia a él. Las células cancerígenas viven en ausencia de oxígeno y en presencia de acidez. De otra parte, es importante saber que el sedentarismo y una alimentación desequilibrada fomentan un ambiente ácido dentro del organismo, y la acidez expulsa el oxígeno de las células. Los tejidos cancerígenos  son ácidos, y los sanos son alcalinos y necesitan de oxígeno para vivir (2).

Se ha comprobado que la ingesta de leche no es beneficiosa en el tratamiento del cáncer debido a que este alimento produce flemas, que es el alimento preferido de las células cancerígenas (3).

Si quieres saber más sobre este tema, no dejes de leer en mi blog el artículo: TRATAMIENTO DE ENFERMEDADES POR MEDIO DEL EJERCICIO FÍSICO: El CÁNCER




1. Escala de Gleason es un sistema que se emplea para medir el grado de agresividad de un cáncer.

2. El Blog del Dr.Sergio Simphronio - TRATAMIENTO DE ENFERMEDADES POR MEDIO DEL EJERCICIO FÍSICO: El CÁNCER

3. El Blog del Dr.Sergio Simphronio - TRATAMIENTO DE ENFERMEDADES POR MEDIO DEL EJERCICIO FÍSICO: El CÁNCER


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